I JORNADAS ESTATALES DE PSICOLOGÍA EDUCATIVA

Respuestas de la Psicología Educativa a los retos educativos en la sociedad actual (Madrid, 28 y 29 de Octubre de 2016)

 

Durante los pasados días (28 a 30 de Octubre) se celebraron en la Universidad Pontificia de Comillas (Madrid) las I Jornadas Estatales de Psicología Educativa, organizadas por el Consejo General de la Psicología de España y el Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid, y que concluyó con la posterior reunión del Consejo con los representantes de cada uno de los colegios regionales y sectoriales, entre los cuales se hallaba un vocal del Colegio Oficial de la Psicología de Ceuta (COPCE). En primer lugar, el COPCE quiere agradecer y felicitar a los promotores del evento por la gran calidad y prestigio de los ponentes (no es fácil aglutinar a tantos grandes expertos en la materia en un mismo fin de semana), así como por la calidad organizativa, el magnífico lugar elegido y el exquisito trato brindado a todos los asistentes que allí intercambiaron conocimiento y experiencias sobre un tema candente en nuestra sociedad actual: la Educación y sus problemáticas.

El psicólogo educativo, a diferencia de pedagogos y psicopedagogos, no es educador ni docente, aunque a veces ejerza de ello bajo la figura del orientador escolar, sino que es un profesional sanitario que reflexiona, evalúa e interviene sobre el comportamiento humano en situaciones educativas, desarrollando las capacidades de los educandos, grupos e instituciones, como así se estableció en el Primer Encuentro Estatal de Psicología Educativa (Barcelona, 2009). Además, sus actuaciones se encaminan al apoyo “especializado” que facilite el aprendizaje y la construcción de capacidades y competencias en todas las áreas del desarrollo psicológico (psicomotriz, intelectual, social y afectivo-emocional), en todos sus ámbitos (escolar, familiar y social) y también al asesoramiento del profesorado, proporcionándole herramientas que faciliten su labor y capacitándoles para atender a las necesidades psicoeducativas de los alumnos, a diferencia de las antedichas profesiones, más circunscritas al ámbito puramente formativo, curricular y didáctico.

Es por ello que el presente de la Psicología Educativa está marcado por un espíritu reivindicativo que, en base a las evidencias empíricas basadas en la práctica y a innumerables investigaciones realizadas en los últimos años, sensibilice a los responsables político-administrativos en pro de la adopción de medidas necesarias para delimitar los ámbitos de actuación de cada disciplina que conforma el espectro de la educación, y se retome el protagonismo del cual el psicólogo educativo gozaba en el pasado, pues sólo así se podrá optimizar en el futuro las capacidades de un sistema que actualmente no alcanza a comprender la importancia de la diferenciación de la actuación de las distintas ramas educativas, y que mete en el mismo saco la labor de tres disciplinas distintas.

Respecto al futuro, las aportaciones de la Psicología Educativa apuntan hacia una educación más emocional que puramente cognitiva, pues las investigaciones reportan un mejor y más duradero aprendizaje. También hacia la toma de conciencia sobre las recientes aportaciones de la neuropsicología y de las modernas técnicas psicodiagnósticas, y basadas en el principio de que, más allá de trabajar el intelecto, se fomente una mejor convivencia entre iguales (bullying) con especial énfasis en el uso de las nuevas tecnologías (ciberbullying),  y que se base en valores universales que hagan de nuestros niños seres felices y buenas personas, además de buenos profesionales en todos los campos.

Antonio Cabrera Rada (nº col. CE-00131)

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